jueves, 30 de abril de 2015

Aquí 


    Y una vez más su sonrisa escapa de mí, y su piel marchita en el recuerdo de un momento ya sepultado en el pasado, donde ya jamás podre tomarla entre mis brazos y expresarle sin palabra alguna cuanto le deseo, cuanto le pienso, y cuanto le siento, pues a pesar de ser un cuerpo en la oscuridad tendido a mi lado, he visto sus colores, los colores de su alma, los colores de su ser, aquellos que no me mienten, aquellos que me revelan quien está allí, o acá, aquellos que me dicen a donde va, ese camino que con sus palabras esconde, y con su mirada disipa para ignorar que ya no estará más, pero fe aun sobre todo es lo que ella deja allí, en mi cama, cual flor al amanecer, fe en cultivar aquel romance que tal vez nunca acabara, y pues aquí me tendrá, esperando y escribiendo como loco perdido entre bosques de soledad y abrazos de un amor que se silencia en distancias de tiempo que jamás se acabaran, tiempos que con el mismo tiempo se acabaran, hasta que finalmente juntos volvamos a estar.


Jesús Todemun

martes, 14 de abril de 2015



Atrapada


-¿qué estás haciendo?
+una máquina para saber a dónde vamos después de morir
-pero para eso puedes traer un autrochakman
+no, ellos solo saben cómo estas los muertos, que no podemos ver, nunca saben dónde están
-¿y para que quieres eso?
+imagina las posibilidades de saber dónde vamos al morir, eso implicaría que podríamos descubrir tal vez dimensiones nuevas, o llevar al descanso a aquellos que no pueden por si solos
-¿no te basta con la dimensión en la que vivimos? o ¿es que ya no me quieres aquí?
+¿acaso no te gustaría tener el descanso eterno que mereces?
-soy feliz a tu lado, sin importar nada
+pues yo no creo que eso este bien
-¿ya no me amas?
+claro que te amo, te amo desde el primer momento en el que te vi y lo sabes, y es por ese amor que ya no puedo soportar más verte atrapada aquí.
-comprendo
Dijo con un susurro mientras se desvanecía
+por favor, sabes que esa tampoco es la solución, que no te vea no significa que dejas de estar atrapada aquí...
el silencio se volvió incomodo, pero sabía que ella no volvería al menos en un par de días, el tiempo para los etéreos era complejo, un pestañar en sus existencias podían ser días para nosotros, sin embargo debía mantenerme firme, mantener mis convicciones sin importar nada, todo lo que ahora hacia, lo hacía por ella, por su bien, por su libertad, suelo repetir la historia en mi mente una y otra vez para saber que lo que hago es lo correcto, 1 de abril del 2015, hacíamos el amor como cualquier otra mañana, aunque notoriamente más eufóricos de lo habitual, esa tarde el registro civil nos esperaba para ser marido y mujer, nos duchamos juntos, después de acabar, nos vestimos el uno al otro, y desayunábamos nuestras tostadas especiales, nada nos podía separar, nada nos podía dañar, juntos éramos invencibles, o eso creíamos, sin sospechar nada nos subimos al auto, nuestras familias nos esperaban, todos éramos felices, la vida nos sonreía, pero fue en ese momento, cuando todo estaba listo, cuando ella simplemente confirmaría nuestro amor, que el caos se desato, nunca he comprendido los fanatismos, y nunca me pudieron agradar, ahora incluso sé que los odio, ya que después de ver esas mujeres entrar, gritar su odio contra los hombres, y arremeter contra nuestra felicidad, "que el matrimonio es arcaico decían", "que las argollas son suicidio" gritaban, se arrojaron sobre nosotros sin piedad, incrustaron sus puñales en mi espalda mientras trataba de defender a mi amada, me dieron por muerto cuando caí al piso, y mientras caía, con la última gota de conciencia en mi ser, vi cómo le cortaban la mano, tratando de tomar su argolla, vi cómo le cortaban el cuello, tratando de tomar su libertad desperté unos meses después, mi última y primera imagen fue la de mi amada, no podía soportar no tenerla más a mi lado y a pesar de las advertencias rogué a los dioses de Cizemun que me dejaran verle una vez más, o me llevaran junto a ella, pero ellos cumplieron con mi primera petición, y me devolvieron a mi amada, sin embargo no era más que su alma, su alma perdida que por mi culpa está atrapada aquí, y que a toda costa liberare, terminare mi nave, terminare esta esfera, y cuando lo haga, la llevare a su descanso eterno, terminare los cálculos, podre entrar en lo etéreo sin problemas, sé que poder llevarla al más allá, no importa cuánto me tome, no importa en cuantos fragmentos deba dividir mi alma para probar su efectividad, si debo sacrificarme por ella, lo hare, hare todo lo que pueda sin importar las consecuencias, terminare la esfera, me sentare en ella, y recorreré cualquier dimensión que sea necesaria para salvarla, debo… salvarla… debo… debo… salvarla.

Jesús Todemun


Pomo


-¿A dónde vas?
Vi en su mirada mientras avanzaba hacia la puerta que ya sabía la respuesta pero de todas maneras conteste.
+Al trabajo
-Tú no tienes un trabajo
+Tú ni siquiera existes
-Existo tanto como existes tú
+Pasamos por esto cada década, cada ¡maldita! década
-Y a pesar de ello, llevas más de cien años insistiendo con eso de trabajar
+¿No podrías simplemente sonreír y desearme un buen día?
-Nosotros ni siquiera tenemos percepción del tiempo imbécil
+Todo está en tu cabeza
-¿Cual cabeza imbécil?
+Sabes que me desagrada que me insultes tanto
-¿Y que vas a hacer? ¿matarte? pues te tengo malas noticias, ya lo hiciste imbécil
+No fue mi culpa y lo sabes
-Se suponía que eras tú el que arreglaría esa fuga
+Tenía una familia que mantener por si no lo recuerdas, un trabajo al que asistir
-¿Esa es tu mejor excusa? ¿cien años y aún no eres capaz de admitir tu error?
Sentía que nada de lo que pudiera decir ayudaría en ese momento, asi simplemente me quede frente a la puerta y espere más insultos.
-¿Sabes siquiera porque te detengo siempre que intentas salir?
+Nunca me lo has dicho
-Porque allí fuera no hay nada para nosotros, ni siquiera podemos salir de verdad,
+Eso es una mentira
-Adelante imbécil, inténtalo
A pesar de haberlo hecho tantas veces en el pasado, esta vez por más que trataba de tomar ese pomo, no podía, hasta que me di cuenta de la verdad, "la última vez que tome ese pomo, estaba vivo", súbitamente ella comenzó a reír, y simplemente no pude evitar reír con ella.
-¿Que vas a hacer ahora?
+¿Sabes? fue mi culpa, no sabía lo que tenía que hacer, nunca había cambiado una cañería así que el plan era simplemente salir esa mañana, ir al trabajo y desde allí llamar a un técnico para arreglar todo antes de que pudieras verlo
-Gracias... eso era todo lo que quería escuchar...
El destello fue extraño, ella comenzó a iluminar la habitación y antes que pudiera decir algo, yo también comencé a iluminar el lugar, de un momento a otro ya no nos encontrábamos mas en esa habitación, de un momento a otro, con esas simples palabras, finalmente éramos libres.

Jesús Todemun

sábado, 11 de abril de 2015



Un Real Espejismo



La luz es tenue, solo entregada por unas sencillas velas en el lugar, donde casi no hay luz directa excepto aquella que jamás abandona tu mirar, aun así es en esa oscuridad que tu sonrisa se siente nunca acabar. El suave vestido que lleva tu cuerpo cambia de colores según el movimiento, incluso a pesar de no necesitarlos pues es transparente, como la luz en lugar, en el tu cuerpo se mueve al ritmo que tus manos danzan en el aire, con vueltas tan tranquilas, que puedes verlas lentas, pero veloces, casi como si no sucedieran, aun así sabes que están allí, y es con ellas que te acercas de a poco a mi confusión, tu rostro, tu sonrisa y tu mirada, ahora se posan sobre mi ser que absorto en tu imponente presencia que solo sabe sonreír tímidamente, con ello te ríes de mi ingenuidad y comienzas a jugar, las telas comienzan a caer, poco a poco desapareciendo, transformándose en los diversos elementos, siendo así agua mientras caen, volviéndose cristales al chocar en el piso y terminando como simples nubes de colores que comienzan a cubrir una vez más tu cuerpo que no deja de moverse de un lugar a otro dejando tu sombra atrás quien te acompaña en el ritmo de tu danzar a quien también sonríes, pues sabes que siempre te acompañara y es allí que lentamente comienzan a ser un solo ser, entrando en la oscuridad, desapareciendo poco a poco, dejando solo que se queden allí los sonidos de su inaudible sonrisa  y un beso que has dejado en aquel viajero que no comprende lo que ha visto, pero sabe que comprende lo que ha sentido.


Jesús Todemun

jueves, 2 de abril de 2015



Alma ante ti

Si me mostrara ante ti
Tal cual mi alma es
Podrías dormir en ella
Y llevarla donde quisieras

Si me mostrara ante ti
Tal cual mi alma es
No habría tiempos de espera
No habrían no’s o si’s

Si me mostrara ante ti
Tal cual mi alma es
No habrían más barreras
No habrían más fortalezas

Y eso es mi corazón
El cual no podría darle a cualquiera
Pues esa es mi alma
Si me mostrara ante ti
Tal cual es

Si me mostrara ante ti
Tal cual mi alma es
Tal cual sería mi persona
Y ya no habría razones

Y ya no habría razones
Solo pasiones
Solo amores
Solo mi alma ante ti.

Jesús Todemun