Vacaciones
Estaba yo en el negocio que suelo
frecuentar cerca de mi casa comprándome algo para la resaca, cuando llego un
tipo de la nada y me comenzó a agarrar a chuchadas, al principio no entendía
que sucedía hasta que dijo algo sobre "su mina" ahí comprendí que de
seguro podía ser el pololo de alguna de las muchachas con las que había
mantenido relaciones íntimas (por no decir que me las culie) en los últimos 15 días
(las mejores vacaciones de mi vida debo acotar), lo cual era un problema, pues
durante esos 15 días, (además de pasármela con una borrachera increíble) había
introducido sin asco alguno mi pene en al menos 7 mujeres distintas (o al menos
7 eran las que podía recordar, pues me asegure de que fueran mujeres antes de
consumar el acto) sin embargo la caña en aquel momento no me permitía pensar
con claridad, por lo que la idea de correr, o tratar de calmar al tipo, no eran
factibles, sin embargo, en algún punto el desconocido finalmente dijo el nombre
de su pareja, a la cual de hecho no me encule, única y exclusivamente porque el
día que ella llego para “el trámite”, yo no le abrí la puerta pues de lo borracho
me había quedado dormido en el baño mientras cagaba (a modo de consejo: jamás
lleven su celular al baño cuando están ebrios y quieren cagar, o este podría terminar
como el mío, dentro del inodoro incrustada en un mojón), al recordar esto comencé
a reír, acto que rápidamente paso de ser divertido a doloroso, ya que antes que
siquiera pudiera explicar algo, me encontraba en el piso siendo pateado por el
desconocido, quien no satisfecho, antes de marcharse, orino sobre mí, jamás
olvidare ese día, fue el no polvo más doloroso y pestilente de mi vida, jamás pensé
que sería golpeado por no tirarme a la mujer de otro... karma... eres una perra.
Relatos de un mujeriego por Jesús Todemun
Pegarse un no-culeo es muchísimo mejor que no culear.
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