Entonces me dice algo nervioso mientras comenzaba a reír ―No me digas que eres de esas personas que lava el jabón antes de usarlo.

Lo mire fijamente antes de darle en el gusto y preguntar ―¿Y qué es lo gracioso en eso?

―¿Acaso no ves la ironía? ―Pregunto mientras mi cuchillo se deslizaba por su garganta y con las pocas fuerzas que aún le quedaban comenzaba a llorar, fue en sus últimos momentos mientas su sangre terminaba de llenar mi rostro que la risa invadió mi ser, finalmente había comprendido la ironía.

Microcuento: "Ironía", Relatos de sótano por Jesús Todemun